Lydia
LOS NERVIOS DEL VIAJE
HERMANA
UNICORNIA-ALEGRÍA-JUGAR-FELIZ-DIVERSIÓN
Érase una vez una niña que vivía con su hermana y su madre, eran muy alegres y un día fueron a dar una vuelta y se encontraron a una unicornia que jugaba y se divertía. Entonces fueron a verla; les parecía muy bonita, suave,limpia..., así que decidieron ir a acariciarla y parecía que era muy feliz. Luego, le llevaron comida y fueron muy felices.
HACER LAS MALETAS
EL HADA
Érase una vez una hada llamada Roselia que vivía feliz con su familia. Un día se levantó y no vio a nadie en su casa. Entonces se fue al campo a buscarlos, no encontró a nadie y decidió volver a su casa. Cuando llegó, vio a toda su familia en casa y les preguntó: "¿Dónde estabais?" Ellos le contestaron que habían ido a coger comida para el duro invierno.
Roselia no entendía nada, así que se fue al campo a pensar. Cuando volvió vio a toda su familia saltando, se puso a pensar y se dio cuenta de que era su cumpleaños.
¿Y si un ascensor llegara a la Luna?
Érase una vez una tarde tranquila el alcalde de la ciudad de Clasin llamado don Francisco Pérez decidió crear un ascensor que llegase hasta la Luna. Decidió que al día siguiente se pondría manos a la obra. Entonces se fue a dormir muy pronto.
A la mañana siguiente empezó a dibujar los planos y a pensar cómo podría hacerlo y se le ocurrió la maravillosa idea de construirlo en lo más alto del pueblo. Cuando por fin consiguió los planos, empezó a construirlo.
Al cabo de dos meses de esfuerzo y constancia, consiguió terminarlo y avisó a todos los habitantes del pueblo para acudir a la inauguración. Luego, el alcalde se arremangó dio su discurso y se montó en el ascensor subió y subió hasta la Luna. cogió un trozo de queso y bajó para demostrar este hallazgo.
BLANCANIEVES
MANZANA
Era una mañana tranquila, yo estaba en el árbol como todas las mañanas hasta que de repente una anciana muy guapa pero con una voz muy fea me cogió y me llenó de veneno. Llamó a la puerta de una casa de enanitos, abrió la puerta una joven y la anciana le dijo que me comiese, ella aceptó y me dio un muerdo y se envenenó.
LA ESPERA
LA VENTANILLA
A lo lejos del tren
se veía a mi familia
esperando en el andén
EL TRASBORDO
CAMISETA
Fue un día como otro cualquiera. Yo estaba en la tienda como siempre hasta que de repente vino la dependienta y abrió la tienda, encendió las luces, abrió las ventanas...
Al cabo de diez minutos vino el primer cliente del día. Era un extranjero y vino con su familia. Estuvieron viendo algunas camisetas hasta que al final llegaron a mí y junto a otras camisetas me compraron.
Me metió en una mochila bastante pequeña y entonces yo estuve muy apretada. Cuando llegaron a su hotel, me sacaron y me metieron en su maleta y la metieron en su coche.
Cuando al fin llegaron a su casa, me sacaron, me plancharon y me metieron en el armario. Al día siguiente, me sacaron me envolvieron en papel de regalo y me regalaron a uno de los hermanos del padre.
LA POSTAL
